jueves, 28 de mayo de 2020

Texto de Apoyo sobre Dahrendorf

La autoridad como determinante de la clase: Ralf Dahrendorf

Por Daniel Contartese


Ralf Dahrendorf es un autor poco estudiado en nuestro país, por eso es importante realizar una pequeña introducción sobre su pensamiento para poder entender su posición con respecto a la teoría de las clases. Señala que cualquier sociedad está sujeta a procesos de cambio permanentemente. A diferencia de los teóricos funcionalistas que afirman que todo elemento de la sociedad contribuye a su estabilidad, desde la teoría del conflicto, de la que Dahrendorf es un exponente, se identifica que existen muchos elementos de la sociedad que contribuyen a la desintegración y el cambio. Asimismo señala que la sociedad tiene dos caras: el conflicto y el consenso y, por lo tanto, la sociología debe dividirse en dos vertientes, la teoría del conflicto y la teoría del consenso. La sociedad no podría existir sin conflicto y consenso, que son prerrequisito uno para otro, no podría existir conflicto sin un consenso previo.
Dahrendorf se centró en las grandes estructuras sociales, en ese sentido señalaba que existían dos grandes teorías sobre ellas:
1.       la teoría de la integración, donde las estructuras comprenden una unidad, un sistema funcionalmente integrado, mantenido en una situación de equilibrio mediante la institucionalización de determinados procesos, y que en tal sentido, representa una situación de orden.
2.       la teoría de la dominación, que alude que una unidad estructural es una asociación de dominación que se mantiene unida por medio de la coacción y que contiene en sí misma el germen de su superación, por ello es algo inestable, en mutación permanente.
Teoría de la integración
Sistema funcionalmente integrado
Situación de equilibrio institucionalizado
Situación de orden
Ordenación jerárquica de las funciones
Teoría de la dominación
Asociación de dominación
Coacción inestable
Mutación permanente
Conflicto de clase

Existen en la sociedad fenómenos que solo pueden ser explicados mediante la teoría de la integración, como los procesos de ordenación jerárquica de las funciones. En cambio, existen otros fenómenos que solo se pueden explicar desde la teoría de la dominación como el conflicto de clases. Cualquiera que sea el aspecto desde el que se consideren las estructuras sociales, deberá incluirse en el análisis tanto la esfera fáctica o institucional como la esfera del comportamiento.
Dominación e integración son conceptos que se corresponden y muestran dos lados de una relación asimétrica. La misma estructura social que desde el punto de vista de la teoría de la integración aparece como un sistema funcional sin fricciones, es para la teoría de la dominación un conglomerado explosivo, mantenido coherentemente mediante la coacción. Ninguna de ambas teorías es falsa sino que a cada una le corresponde una serie de fenómenos.
Desde el punto de una teoría del conflicto social tiene más sentido definir las funciones o puestos sociales por medio de determinadas líneas de intereses que superan la integración de una estructura existente y que pueden tener consecuencias disruptivas. La teoría de la integración, en cambio no puede admitir la existencia sistemática de conflictos modificativos de las estructuras.
La teoría de las clases parte del supuesto de que en toda sociedad concebida como asociación de dominación existen dos conjuntos de posiciones, donde uno tiene el poder legítimo, es decir, que esperan del resto una actitud de obediencia. Dentro de la estructura, constituyen estas posiciones, los elementos de coacción y control. En los procesos de cambio social es función de esas posiciones mantener la vigencia de lo existente, es decir, conservar el status quo. La aceptación de las normas puede forzarse por medio de sanciones, cuyo monopolio corresponde a los cargos de autoridad.
Este es un concepto importante para Dahrendorf ya que las diversas posiciones que existen en la sociedad tienen diferentes grados de autoridad. Esta no reside en los individuos, sino en las posiciones que ocupan. Por ello, para el análisis del conflicto es necesario identificar los diversos roles de autoridad en el seno de una sociedad. La autoridad siempre entraña dominación y subordinación. De los que ocupan posiciones de autoridad se espera un control sobre los subordinados, es decir, dominan en virtud de que eso es lo que se espera de ellos por el resto del grupo, no debido a sus propias características psicológicas. La autoridad no es una constante, ya que ésta reside en las posiciones que se ocupan y no en las personas. Por ello, una persona que ocupa un lugar de autoridad en un lugar, no necesariamente va a ocupar una posición similar en otra. De la misma manera, una persona subordinada en un lugar, puede ocupar una posición de autoridad en otra. Esta idea se deriva del argumento de que la sociedad se compone de varias unidades que denomina asociaciones imperativamente coordinadas, o sea asociaciones de personas controladas por una jerarquía de posiciones de autoridad.
La autoridad dentro de cada asociación es dicotómica, conformando dos grupos de conflicto: los que desempeñan posiciones de autoridad y los que ocupan posiciones subordinadas. Cada uno defiende posiciones que son contradictorias. Por ello, el conflicto de intereses dentro de cualquier asociación está latente en todo momento, lo que significa que la legitimidad de la autoridad es siempre precaria. Sin embargo, este conflicto no necesita ser consciente para que se dé la acción de los dominadores o de los subordinados. Los intereses de dominadores y subordinados son objetivos en el sentido de que se reflejan en los roles ligados a las posiciones. Los individuos no necesitan internalizar estas expectativas ni tener conciencia de ellas para actuar de manera coherente. Los individuos se ajustan o adaptan a sus roles cuando contribuyen al conflicto entre dominadores y subordinados. Estas expectativas inconscientes de rol las denomina intereses latentes. En cambio, los intereses manifiestos son intereses latentes que se convierten en conscientes.
Luego distingue tres tipos generales de grupos: los cuasi-grupos, los grupos de interés y los grupos de conflicto. Los primeros corresponden a los “agregados de titulares de posiciones que tienen los mismos intereses de rol”. La característica formal constitutiva de los cuasi-grupos consiste en la existencia de ciertos intereses latentes comunes, pero estos son solo una construcción teórica por lo tanto, son solo fenómenos de ordenamiento. Estos constituyen campos de reclutamiento para los grupos de interés, quienes tienen una estructura, un programa u objetivo. Son siempre grupos secundarios, sus componentes siempre están en contacto a través de su pertenencia común, por medio de la vía indirecta de los representantes elegidos o designados por ellos mismos. Los grupos de interés son siempre más reducidos que los cuasi-grupos, la relación de unos y otros puede equipararse a la que existe entre los miembros de un partido político y aquellos que votan a su favor. De entre los muchos grupos de interés se pueden distinguir a los grupos de conflicto, que son aquellos que se ven involucrados en un conflicto grupal.
La teoría de las clases sociales nada afirma sobre el contenido empírico de determinados grupos de interés, sino que se refiere a su función en determinados conflictos sociales como unidades de intereses manifiestos que pueden ser explicados a través del supuesto de los intereses latentes y de los cuasi-grupos que estos intereses originan. De toda asociación de dominación pueden diferenciarse dos cuasi-grupos unidos por intereses latentes de clase comunes. La orientación de estos intereses aparece determinada, en cada caso, por la participación en el poder. De los cuasi-grupos se reclutan los grupos de interés cuyos programas articulados defienden o impugnan la legitimidad de la estructura de dominación existente. Dos de estos grupos aparecen en conflicto en toda asociación de dominación.
Se necesitan algunas condiciones para conformar un grupo de interés:
·         Un estatuto fundacional y normas para conformarlo. Mientras que los intereses latentes solo implican directrices hipotéticas de actuación, los manifiestos constituyen programas articulados, muchas veces escritos o posibles de serlo.
·         Personal: Se precisa la presencia de determinadas personas que consideren la organización como cosa suya, que la establezcan prácticamente y que la dirijan.
·         Instrumental de carácter material.
·         Actividades regulares
·         Condiciones técnicas de organización. La ideología como articulación y codificación de intereses manifiestos constituye una condición técnica, aunque ésta no originan las clases pero las ayudan a nacer.
·         Una función objetiva.
La constitución de los grupos de interés organizados solo es posible empíricamente cuando el reclutamiento procedente de los cuasi-grupos no es casual, sino que obedece a una ley estructural.
En las estructuras existe un dinamismo que depende de la autotransformación, es decir que es endógeno. Entre los elementos internos que influyen para la superación y transformación de la estructura se encuentran las clases sociales. Uno de los elementos endógenos es la separación y el control o institucionalización del antagonismo de clase en las sociedades industriales desarrolladas.  Dahrendorf critica a Marx señalando que el desarrollo de las fuerzas productivas no sería el único elemento endógeno que podría afectar a la estructura, ya que hay otros elementos no clasistas como la modernización, la lucha racial o religiosa, etcétera. El conflicto de clases es solamente una forma particular del conflicto social.
Admite la existencia como mínimo de dos clases y entre ellas siempre existe un conflicto. Ya que toda teoría de las clases constituye una teoría del cambio de las estructuras determinado por los conflictos sociales. Pero no es necesario un cambio de carácter revolucionario para generar un cambio en la estructura. Según él esto está demostrado a partir del fenómeno de la institucionalización del antagonismo, donde las clases oprimidas pueden lograr cambios estructurales por la vía de la negociación. Tal función cumplieron los sindicatos durante el fordismo.
Dos cuestiones deben quedar claras con respecto a la cuestión de clase: por un lado, los que hablan de clase sin admitir la existencia de un antagonismo entre ellas, aplica incorrectamente la categoría de clase. Por otro lado, clase social y conflicto de clase constituyen categorías inseparablemente entrelazadas. Pero el tipo y la intensidad del conflicto solo pueden determinarse mediante el estudio de las investigaciones empíricas.
Otra de las críticas que Dahrendorf le realiza a Marx es sobre la afirmación de que la causa determinante de las clases sociales es la propiedad privada de los medios de producción. Esto pierde valor analítico en cuanto se separa la propiedad legal y el control real de los medios de producción. Por ello debe sustituirse la posesión o carencia de propiedad privada por la participación o exclusión en puestos de dominación como criterio determinante de la constitución de las clases. Por lo tanto, las estructuras de autoridad o dominación constituyen la causa determinante de la conformación de las clases y de los conflictos de clase. En definitiva, la propiedad es solamente una forma de dominación, no la única. Marx señalaba que la autoridad y el poder eran factores que podían derivarse de la participación en la propiedad privada. Según Dahrendorf no es así, poder y autoridad son factores irreductibles, de los cuales se derivan las situaciones sociales. Allí donde existe propiedad existe dominación, pero no toda dominación implica forzosamente propiedad.
La definición de clase de Dahrendorf es “agrupaciones sociales en conflicto, cuya causa determinante se halla en la participación y exclusión del dominio dentro de cualquier asociación de dominación”. Por lo tanto, el elemento decisivo para su definición está basado en el concepto, complejo y plurivalente de autoridad.
La diferencia específica entre poder y dominación se encuentra en la existencia o carencia de una base de legitimidad de control sobre otros. El poder, es un dominio ilegítimo, de facto; la autoridad en cambio, es un poder legítimo basado en normas sociales institucionalizadas.
A diferencia de otros aspectos de la desigualdad social, las relaciones de dominación dan siempre origen a una dicotomía y no a una continuidad de posiciones. De esta dicotomía en las posiciones de autoridad se deriva el modelo de las dos clases como fundamento típico del conflicto de clases. Pero esta definición analítica es más compleja debido a: la descomposición de las esferas de autoridad pueden aproximar tanto a las dos clases que se produzca entre ambas una zona indefinida; la existencia de competencia entre distintas clases dominantes; asociaciones de autoridad que compitan entre sí, provocando interferencias de autoridad o exclusión de ésta. Por lo tanto, mientras analíticamente toda asociación de dominación da motivo a una dualidad, en los hechos puede presentarse como una guerra de múltiples frentes en la que una serie de grupos luchan entre sí.
Asimismo se presentan una serie de problemas entre las funciones sociales y su personal:
1.       La causa determinante de las clases no es el individuo, sino las relaciones sociales en las que él y los demás se hallan.
2.       El problema del comportamiento: es necesario diferenciar entre la causa determinante de las clases sociales y su carácter empírico. En relación a esto es necesario tener en cuenta:
a.       Las motivaciones e intereses de clase.
b.      Bajo qué condiciones esas motivaciones se transforman en motivos conscientes aceptados.
c.       La cultura de clase, es decir, mediante qué elementos comunes aparecen caracterizadas las clases sociales.
3.       Problema de la permanencia en una clase y de cuan permanente debe ser para que la clase exista y actúe como tal.
4.       El conflicto de clase, en definitiva tiene su base en la distribución social de la autoridad o mando en las asociaciones de dominación. Las clases tienen su fundamento en las diferencias de capacidad legítima de poder inherentes a determinados puestos o posiciones considerados desde el punto de vista de su contenido de autoridad. Es decir, un individuo se convierte en miembro de una clase al asumir su cometido social relevante desde el punto de vista de la autoridad.
Todo individuo es miembro, al menos de una clase porque ocupa una posición dentro de una asociación de dominación, por lo tanto, la pertenencia a una clase se deriva de la titularidad de determinadas funciones sociales.
Varias críticas se le realizan a la teoría de Dahrendorf: Por un lado, se señala que es una traducción inadecuada de la teoría marxista a la sociología. Por otro lado, tiene más elementos en común con el funcionalismo estructural que con la teoría marxista, por ello tiene las mismas deficiencias que presenta el funcionalismo estructural.
Asimismo carece de una clara definición del conflicto que delimite lo que en verdad es conflicto y lo que no lo es. También presenta un alto grado de vaguedad porque no se especifica en ella el nivel de análisis en el que opera. Es decir, quiénes están en conflicto, si los individuos, los grupos, las organizaciones, las clases, etcétera.

jueves, 7 de mayo de 2020

Foro para opinar

 ¿Cuáles de los enfoques marxistas o neomarxistas vistos considera más adecuados para interpretar los procesos de lucha de clases en la Argentina actual? Proponga ejemplos.



Trabajo Práctico Unidad 2 (colgar antes del 30 de mayo)


Una de las cuestiones más debatidas en los últimos 25 años es el papel volátil  de las clases medias frente al neoliberalismo en nuestro país. Fenómenos como el apoyo electoral a las políticas menemistas y la posterior rebelión contra el gobierno de De la Rúa, el apoyo y el enfrentamiento a los gobiernos kirchneristas,  el apoyo y progresivo descontento frente al gobierno de Macri, y el actual apoyo al gobierno de Alberto Fernandez en esta situación tan delicada,  muestran un errático posicionamiento político de clase. Fenómenos como las asambleas barriales, los ahorristas estafados, y los cacerolazos de claro contenido clasemediero desafía los esquemas analíticos vistos en esta unidad. Conteste al menos dos de alguna de estas:
1  1) ¿Cómo entenderían la volatilidad de la clase media frente a los gobiernos neoliberales los enfoques neoweberianos (elija uno, Parsons, Dahrendorf, Parkin)?
    2) ¿ Cómo entenderían la volatilidad de la clase media frente a los gobiernos neoliberales los enfoques neomarxistas (elija uno, estructuralista, historicista, marxismo analítico, constructivismos)
    3)¿Cómo analizar de acuerdo a Dahrendorf el tema de los CEOs y la gran burguesía en nuestro país?. Proponga ejemplos.
    4) ¿Cómo analizar las políticas de exclusión social neoliberales en términos de “cierre social” y “usurpación” de Parkin?. Proponga ejemplos.
    

Texto de apoyo Unidad V- Aproximaciones al análisis de clase y los antagonismos en las sociedades latinoamericanas contemporáneas

 2 Links para la bibliografía Unidad 5   https://drive.google.com/drive/folders/1fFl4eZkp5OLyNMZZslu7sR1PMLY8p66z?usp=sharing https://drive....